Desde el sindicato LAB denunciamos públicamente en numerosas ocasiones la necesidad de modificar la Orden de 22 de marzo de 2000 por la que se regulan los comedores públicos y la Circular de la Viceconsejera de Educación y Servicios sobre funcionamiento de los mismos. Para ello, el consideramos imprescindible que el consejero de Educación, Jokin Bildarratz, y el viceconsejero, Xabier Aizpurua, convocaran a la mesa de diálogo con la representación de las trabajadoras.
Pues bien, el Departamento de Educación, después de 23 años, ha iniciado el procedimiento para modificar, de forma unilateral y sin ningún tipo de diálogo social, la orden de 2000 que regula los comedores de los centros públicos. Es más, ha aprovechado el mes de agosto, inhábil para el sector, para hacer el cambio.
Además, recordamos que el acuerdo firmado el 1 de junio por el Sindicato LAB con el Departamento de Educación “para la mejora de las condiciones laborales del personal en desarrollo de la ley de educación”, recoge para el 2023 el procedimiento para llevar a cabo un análisis detallado de los servicios contratados, acordándose los temas básicos y criterios, siendo el personal educativo de comedor uno de los colectivos priorizados. Por tanto, hacemos un llamamiento al Departamento de Educación para que negocie con las representantes de las trabajadoras la nueva orden que afectará a las educadoras y demás trabajadoras del comedor.
El comedor debe ser un espacio más del centro, de seguir educando y estudiando en él, y no un simple servicio complementario más. Por ello, es imprescindible incorporarlo al proyecto educativo de cada centro.
No podemos olvidar que este precepto afecta directamente a las condiciones laborales del personal de los comedores, entre otras cosas, al asumir más funciones de las recogidas en el convenio colectivo.
Por ello, le pedimos que se reúna con los sindicatos y agentes que formamos la comunidad educativa para hacer una transición consensuada hacia un nuevo modelo de Comedor.
